"Happy Together" una película de Wong Kar-wai

Habitando un cuarto pequeño de un sencillo hotel de Hong Kong pasa sus días junto a su familia, en donde comparten pasillo y cocina con desconocidos, al igual que, Ho Po-wing y Lai Yiu-fai personajes de la película Happy Together que nacen de su mágica, poética e intensa imaginación, llevándolo a obtener el premio a mejor director, mayor logro en el Festival de Cannes de 1997. Su afectuosa infancia desarrolló en él, Wong Kar-wai, un gran vínculo con la literatura sudamericana contemporánea conociendo a escritores del realismo mágico como: Gabriel García Márquez, luego llegar hasta al contreversial escritor argentino Manuel Puig, censurado y exiliado de su país por ser considerado antiperonista; incitó a Kar-wai a escribir Happy Together, guión inspirado en el libro The Buenos Aires Affair, que agita la sensibilidad política y a su vez realiza una gran parodia.

Las largas y entretenidas historias que relataba su padre, acerca de, huéspedes que iban y venían, de enredos de alcoba y probablemente de algún otro desamor fueron hilando historias de amor, desencuentros, infidelidades, celos, ruptura y claro, de reencuentros de dos jóvenes hongkoneses; ambientadas de música latinoamericana.

La película Happy Together, ha calado y hecho cosquillas a la censura, tal como lo cataloga su creador, película en la que se muestra la relación de una pareja gay, idea que se desliga totalmente de ese concepto, logrando mostrar y sentir un amor universal. Que embelece y atrapa mediante su discurso poético en imagen, actuación y guión. Sus personajes sufren la levedad mientras contemplan un universo en constante cambio en una ciudad desconocida y ajena a ellos, Buenos Aires, Argentina. Escenario que sintió y vio el proceso de una pareja que se desenvuelve en un mundo caótico que han construido a base de discusiones, arrebatos y desamores, que inundan la vida de convivencia, pretenden mostrar una experiencia amorosa amarga, de sentimientos intensos y grandes frutaciones.

Wong Kar – wai concibe su filmografía como una globalidad en donde los personajes, espacios y situaciones se repiten, no tanto como una marca de autor, sino una creencia firme. En la totalidad de la obra de Kar-wai los personajes existen, han existido previamente y existirán en el futuro, aunque no necesariamente en una misma dirección. Esta creencia nace de aquellas historias de su padre que iban y venían, desaparecian y aparecian como los inquilinos de aquel hotel que vivió diversos momentos de la vida del gran director Wong Kar-wai.